martes, 20 de marzo de 2012

Sobre advertecia no hay engaño.

Las palabras que hoy albergan en mi mente, en mi alma son tan interminables e inentendibles como lo que siento por otro ser humano.
Es una situaciòn extraña y contagiosa, pasar de una emociòn a otra, sin sustento, sin meta... sin nada.
El odio que aumenta en mis arterias, palabra bastante fuerte, sentimiento de lo màs cruel, pero es que cada palabra que me dabas era un corte a la pequeña mecha que logra encender la bomba de mi cuerpo, que logra que quiera gritar y que pierda mi paciencia en un segundo.
Todo por esa escencia, esa persona, esa maldita alma que no tuvo que llegar al mundo. ¡¡MALDITA SEA!!, vamos que no aporta nada la perdedora, quiere jugar siempre a lo mismo, màs no con las mismas reglas.
Quiere sentir que no hay nada que perder, que hay mucho que ganar, pero... ¿y los riesgos por jugar con fuego què?, ¿acaso poco importa tu cuerpo?, si tanto te importa tu apariencia, ¿por què juegas con las puas?, los cuchillos algun dìa podràn caer, recuerda eso y tu frente serà su nuevo hogar.
Cuida bien tus palabras, pero tambièn tus acciones, nunca sabes cuando alguien podrìa dañarte desde la espalda y quedar en un vago intento de ganar la partida.
Solo... es una advertencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario